Oct 15 2015
Aceptaras todo lo que te diga y todo lo que te haga
“Si me quieres aceptaras todo lo que te diga y todo lo que te haga”
El otro dia escuchaba en terapia a los familiares de una mujer de 41 años. Estos estaban preocupados por su hija y no sabían qué podían hacer.
La joven está con un hombre desde hace seis años. Es el segundo matrimonio de ella, con el primero tuvo dos hijas, ahora adolescentes.
Su actual marido desde el inicio alquiló su piso y fue a vivir al piso de ella. Desde que entró en la casa quiso “educar en la disciplina a las niñas”; con castigos, amenazas, chillidos, insultos. Diciéndoles a todos que lo hacía por el bien de ellas. La mujer como estaba encantada con él le cedió “el poder” de la crianza. Ahora, comentaba la familia que su actitud hostil también se dirigía hacia ella. Le dijo el otro día “quiero que me demuestres y amor.voy a dejar de pagar la hipoteca, y no pagaré nada más en esta casa. Si ahora me dejas me demostrarás que estabas conmigo por mi dinero” .
Uffff!!!! Vaya frase bomba, es un mensaje cargado de violencia, de acoso, de chantaje emocional, donde se quiere establecer una relación de jerarquía, de poder, es un examen con trampa (porque hagas lo que hagas sufrirás las consecuencias negativas).
Voy a escribirlo en mayúsculas EL MATRIMONIO NO NECESITA EXAMENES DE AMOR. NINGUNA RELACIÓN SANA LAS NECESITA. En el amor no es necesario el poder, ni los chantajes, tampoco ridiculizar, acosar, insultar, mucho menos la violencia ni física ni emocional.
La familia me explica que este “hecho” es uno más de los que él le ha ido enviando y haciendo a ella y a las niñas durante estos años.
Este fin de semana, después del mensaje bomba, ella y las chicas deciden ir al pueblo sin él. Sus padres y hermano quisieron hacerle ver que esto no es amor, que el miedo no puede ser una emoción que pueda aparecer en una relación. Ella parecía que había “entendido” el mensaje después de muchas lagrimas, pero como suele pasar en estos casos de dependencia emocional, con parejas que a veces utilizan conductas con carga violenta (que no tiene porque ser física), en el momento que ella le hace explicito que quiere romper la relación, él vuelve a sacar su faceta encantadora (aquella de la que ella se enamoró) y vuelve a perdonarle, vuelve a darle otra oportunidad (la familia dice que han perdido la cuenta de cuantas van). Me comenta la familia como nueva anécdota que este hombre le dijo a una de las hijas de 15 años como carta para demostrar a la madre que quiere mejorar ; “siento haberme metido en medio de una de vuestras discusiones, entre tu madre y tu, pero no me arrepiento de haberte tirado el móvil por la ventana“(¿esto no es una conducta violenta con todas sus letras? Vuelvo a repetir ¡ufff, ufff, ufff!. Los padres están totalmente sorprendidos que su hija no vea esto.
Y con esto no quiero decir que no crea en el cambio. Me dedico a él. Pero para que la gente haga cosas diferentes, es necesario hacer cosas diferentes, ser conscientes que tienen un problema, solicitar ayuda y trabajar para el cambio. Yo he podido ser testigo de personas que han cambiado su forma de vida “Violenta” por otra forma de relacionarse más sana para ellos y los que le rodean.
En estos casos la familia suele sufrir mucho, se siente muy impotente, , ya que ven la situación de peligrosidad, pero no pueden hacer nada al respeto, recomienda que le sigan apoyando, ayudando. Hasta que ella no vea con sus ojos, sienta con su cuerpo, no cambie creencias con su mente , es difícil ayudarlo a él.
En terapia me he encontrado muchas personas (tanto hombres como mujeres), que quieren liberarse de estas relaciones y aprender a quererse para conseguir estar en un futuro en una relación de amor sana. No es un camino fácil, pero he tenido el honor de ver que muchos de ellos lo han conseguido..
Si quieres aprender a vivir libre de cadenas puedes contactar conmigo.
Oct 26 2015
Reflexiones en terapia: Sexo espontaneo
Muchas veces en terapia aparece el tema de que la pareja no tiene sexo espontáneo. Están esperando que aparezcan las ganas de tener relaciones sexuales con la pareja para llevarlas a término. Pero el día a día está lleno de tareas para realizar.
Existe un mito o leyenda que ha dificultado la sexualidad; la que desvalora el “sexo cuando se ha programado”. El único que vale es aquel que surge sin pensarlo.
M: -Nuestras relaciones sexuales han cambiado. Antes nos apetecía en cualquier lugar y al cualquier momento. Había pasión. Ahora parece que nos cueste ponernos. Cuando llegamos de trabajar, después de hacer la cena, acostar al niño, nos sentamos un momento en el sofá para hablar de cómo nos ha ido el día y nos quedamos dormidos. Al final pasan los días y no hemos tenido relaciones sexuales.
E: -a veces es necesario planificar un momento de intimidad, de sexualidad.
M: – Pero qué dices?. Si hay que planificar el sexo pierde su gracia. Las ganas tienen que salir solas. El sexo tiene que ser espontáneo.
E: -¿A ti te gusta ir al cine?
M: -sí
E: – ¿Cómo decidís la película que vais a ver y la hora de la sesión?
M: – Miramos la cartelera y las criticas. Y negociamos la que nos gusta a los dos. Y elegimos una hora que luego nos vaya bien ir a cenar.
E: – ¿Y cuando vas, haces una reserva de asientos antes de ir?
M: – Pues claro. Como no lo hagas puedes encontrarte que no haya entradas, o que los asientos que estén libres tengan una ubicación mala (o muy cerca o muy lejos de la pantalla).
E: -Y , donde vais a cenar?
M:- a Un restaurante que está cerca de las salas de cine que es tranquilo y la comida es buena.
E: – Os presentáis espontáneamente en el restaurante o es necesario hacer reserva?
M: – Supongo que podríamos probar suerte y presentarnos, pero podríamos encontrarnos que no hubiera sitio. Por lo que no me arriesgo y prefiero hacer una reserva.
E: -tengo que hacerte una pregunta importante. Después de decidir la película, el dia que vas a ir a verla. Llamas para reservar asiento. Y reservas también una mesa en un restaurante. ¿Luego puedes disfrutar la película y la cena?
M: – Sí , lo disfruto. Y además la cena nos sirve para hablar de la película y de lo que nos ha hecho pensar.
E: – Pues la sexualidad es igual. Se puede disfrutar de una sexualidad planificada. Y es necesario planificar un momento de intimidad para poder tener el espacio. A veces el deseo se consigue creando el momento y el espacio.
M: -Nunca me lo había planteado de esta manera.
Pocas veces el sexo es espontaneo, la mayoría de veces hemos tenido que organizar y gestionar algunas variables; voy a escribir algunas escena que se me ocurre de cuando yo era joven y el deseo en la pareja es muy potente; “buscar un hotel”;” ir con el coche hasta un lugar tranquilo y tapar los
cristales con alguna manta o toalla”; “comprar un preservativo”; “depilarnos”; “ buscar un canguro que se quede con los niños”; “ambientar la habitación con velas, incienso, cava”; “dejar los juguetes a mano por si los utilizas”; “buscar una película porno que te guste”….. En todas estas escenas has necesitado un tiempo de preparación, unas veces muy breve y otras con más tiempo.
By Eva Aguilar • Terapia Sexual •