Las buenas relaciones con los demás nos llenan de vitalidad y alegría. Por ese motivo, darnos cuenta de lo que necesitamos y de cuáles son nuestros derechos va a significar una gran diferencia en nuestro bienestar emocional. Cuando nos amoldamos a los demás sin tener en cuenta lo que queremos realmente, podemos estar invalidando una gran parte de nosotros mismos.
La asertividad es una manera consciente, clara, directa y equilibrada de expresar y comunicar nuestras ideas y sentimientos. De esta manera, defendemos nuestros derechos y pensamientos sin la intención de herir o castigar a los demás y, sobre todo, sin violar los derechos de otras personas.
La asertividad es un pilar fundamental para desarrollar una buena autoestima, ya que nos permite comunicarnos de manera efectiva y poder realizar una mejor gestión de los conflictos que puedan surgir.
Para mejorarla, es importante tener presente cuáles son los propios derechos y cuáles son los de los demás para entender que es legítimo defenderlos, igual que pueden hacerlo los otros. Identificar nuestras emociones y tomar consciencia de nuestro cuerpo, va a ser clave en este trabajo. Dediquemos un instante en pensar sobre lo que queremos decir sin pretender cambiar al otro.
Conocer las principales herramientas asertivas nos ayudará a sentirnos más seguros de nosotros mismos al saber manejar situaciones antes las cuales en otras ocasiones nos hemos podido sentir impotentes y frustrados.
Algunas de las herramientas asertivas pueden ser: Decir NO, expresar y recibir críticas, expresar y saber recibir sentimientos agradables y desagradables, hacer peticiones y pedir ayuda.
“Me respeto, te respeto”
Autora: Clara Raventós de la Rosa
Designed by Freepik